¿TU COCHE HA RECIBIDO UN GOLPE?

Por que, como todo en la vida, los  golpes a los que se puede ver sometido nuestro vehículo pueden deberse a multitud de causas, por nombrar algunos, los más comunes entre nuestros clientes, los portazos, ese molesto e incomodo golpe que nos llama tanto la atención. Estos son causas del aparcamiento en batería, ya sea en la calle, aparcamientos o del típico vecino descuidado que abre su puerta sin vigilar el recorrido completo de la puerta.

Otros de los golpes menos habituales aun que no por ello menos molestos, son los debidos por impacto de objetos de un tamaño reducido, desde las piedras proyectas por el vehículo que nos precede en una carretera recién asfaltada o por el contrario en mal estado, hasta por ejemplo las piñas que se caen de los arboles.

Por tanto, todos estos golpes aunque de causa muy distinta, tienen una solución común, una técnica en la que mantener la pintura, reparando solo la chapa dañada. Así de esta manera le garantizamos una reparación rápida y efectiva, en la que será imposible localizar la ubicación del daño así como rastro alguno de la reparación.

Se ha de considerar que, para una reparación con todas las garantías, es imprescindible que se conserve toda la pintura, pero si este no es su caso, no se preocupe. Aun que se haya perdido una pequeña parte de la pintura, se puede reparar el impacto sufrido por la chapa, minimizando de esta manera los daños a una cuestión visual, causada por la falta de pintura.

En cualquiera de los casos, pongase en contacto con nosotros y le asesoraremos la mejor de las soluciones para su caso particular